Mantener la cadena de frío resulta fundamental a la hora de garantizar la seguridad alimentaria, por lo que todos los eslabones implicados, desde productores hasta llegar a nuestro hogar, deben poner especial atención en mantenerla.
Se denomina “cadena” porque está compuesta por diferentes etapas o eslabones. Si alguno de los puntos de la cadena de frío llegara a verse comprometido, toda ella se vería afectada perjudicando la calidad y seguridad del producto.
Mantener los alimentos a temperaturas bajas, no solo garantiza las características organolépticas de los alimentos (textura, sabor, olor, color), sino que paralizan la reproducción de microorganismos patógenos y demoran la pérdida de calidad de los alimentos, con el consiguiente retraso en la degradación del mismo y de sus propiedades sensoriales. Sin embargo, no debemos olvidar que el frío no mata los microorganismos presentes ni detiene la actividad metabólica de su componentes, solo reduce la velocidad de crecimiento y de descomposición del alimento.
Consejos para conservas la carne fresca en casa:
- Una vez en casa, guarda los antes posible y en primer lugar los alimentos congelados. Luego, mete los alimentos frescos en el frigorífico. En la nevera, las carnes y pescados deben mantenerse entre 1 y 4 ºC y el resto, entre 5 y 8 ºC. En el congelador, por debajo de -18 ºC.
- No amontones los alimentos para que el aire frio circule entre ellos y refrigeren rápida y eficazmente.
- Guarda toda la comida bien tapada, para evitar que se manche el interior de la nevera y que se toquen los alimentos entre sí.
- Pon lo que tenga próxima la fecha de caducidad o de consumo preferente más a mano. Lo demás puede estar más al fondo. Así desperdicias menos alimentos.
- Revisa los alimentos de vez en cuando. Si ves alguno que ya ha superado su fecha de caducidad, o bien tiene moho o signos de estar estropeado, tíralo.
Como conclusión podemos decir que…
“LA PERDIDA DE LA TEMPERATURA DE REFRIGERACIÓN O CONGELACIÓN EN CUALQUIERA DE LAS ETAPAS, PERJUDICA LA SEGURIDAD Y LA CALIDAD DEL ALIMENTO.
Tamara Álvarez Redondo
Técnico de Calidad en Embutidos Rodríguez